Entrada breve. Aunque ya habrá tiempo de ahondar en el asunto, aquí sólo quiero hacer algunas observaciones más allá de la geometría política, de partidos y de candidatos.
1. El abstencionismo ha venido creciendo desde hace ya varias elecciones federales como muestra del hartazgo de la ciudadanía. Ya no creemos las mentiras descaradas que los politicastros dicen en sus campañas. La verdad es muy sencilla: quieren la presidencia para hacerse con el poder, incrementar sus riqurzas, fortalecer sus influencias. No les importa el pueblo, ni el bienestar de los demás.
2. Por si esto no fuera suficiente, sus campañas llenas de mentiras y frases huecas las pagamos nosotros. No sólo mantenemos a los oportunistas que ganan las elecciones (aunque sea mediante el fraude como un tal Calderón), sino que además pagamos las campañas de mentiras y falsedades que los llevan al poder.
3. Un muy amplio sector de la población no entiende esto. Es incapaz de comprender nociones tan elementales como "poder", "democracia", o "política". Pero son sus votos (en el supuesto de que no haya fraude) los que deciden. ¿Hasta cuando deberemos seguir esta farsa? Hasta que el pueblo despierte. Sólo el pueblo puede cambiar y enmendar la situación... Pero, ¿puede el pueblo despertar? Esa es la pregunta. ¿No será que tiene el gobierno que merece? La masa ignota e ignorante decide en esta terrible democracia, y es de esa masa de donde salen los politicastros.