jueves, 10 de marzo de 2011

Sobre el convencimiento

Entrada breve. Aunque es muy cierto que para que haya cabrones debe haber pendejos, no deja de ser muy significativo el hecho de que hoy en día, en nuestra bella sociedad, en nuestra próspera cotidianidad, aquel imperativo práctico kantiano es una mera curiosidad de un remoto pasado: a todo hombre se le trata como un medio. El hombre como fin es una ilusión, una utopía, una intelectualidad impráctica kantiana.



Por ello, y con dedicatoria especial para Peña Nieto, Calderón, Estados Unidos, y tantos y tantos más, recordamos aquí la frase de Víctor Hugo: "Nada más estúpido que vencer, la verdadera gloria es convencer".